Texto y Fotografía ARACELI MARTÍN CHICANO
La 37ª edición de una de las ferias de arte más conocidas del mundo y la más importante de España ARCO, contó para este 2018 con la presencia de 211 galerías de 29 países. Sin país invitado para este año pero un concepto como protagonista “el futuro”.
A tan sólo unas horas del comienzo de la feria se producía la ya clásica polémica de todos los años, en esta ocasión provocada por la retirada de la obra de Santiago Sierra del stand de la galería de Helga de Alvear; fue IFEMA quien la retiró y no la feria, retractándose posteriormente con la intención de exponerla de nuevo. No había pasado ni un día cuando la obra del artista madrileño ya se había vendido por 80.000€ y tanto su obra como la galería ya habían salido en todos los medios, un marketing perfecto.
Poco a poco se le fue dando la importancia que se merece el resto de galerías y artistas que componían esta edición de ARCO, con mucha más presencia femenina y un gran número de galerías portuguesas y brasileñas con trabajos de artistas muy interesantes, al igual que las holandesas y danesas que nunca defraudan.
He aquí mi selección de galerías y artistas:
Galería Tim Van Laere (Bélgica): el artista flamenco Rinus Van de Velde plasma en sus dibujos a carboncillo de gran formato imágenes cotidianas captadas anteriormente con la fotografía y que representa posteriormente en el papel creando un nuevo espacio en el que el texto, que normalmente acompaña al propio dibujo, otorga de distinto significado a la imagen.
Galería Nieves Fernández (Madrid) : Alexej Meschtschanow examina las cualidades físicas y estéticas de las establecidas convenciones sociales mediante la escultura y la instalación con un ojo analítico y compasivo, ensambla objetos encontrados, muebles abandonados y fotografías. Su trabajo se centra en el potencial imaginativo y las profundidades psicológicas implicadas en la construcción de identidades que culmina en figuras de una melancolía poética. La obra de Moris gira en torno a temas que señalan la representación, la voluntad social y subjetiva, cuestiones urbanas y culturas marginales, habitualmente dadas por hecho en las sociedades convencionales y que han formado parte de su vida desde su infancia.
Galería Richard Saltoun (Londres): Helena Almeida, si bien es cierto que la artista portuguesa se expresa principalmente a través de la modalidad fotográfica, el disparo fotográfico, constituye el acto final de un proceso de trabajo largo y riguroso, que utiliza un gran número de dibujos, esquemas o grabaciones en vídeo previos donde el cuerpo de Almeida se convierte en el instrumento con el que intervenir, comunicar y crear espacio, espacio pictórico y arquitectónico.
Galería Javier López & Fer Francés (Madrid): Con su característico estilo definido por los colores planos, la escasa profundidad del espacio pictórico y el empleo de una línea fina pero sumamente descriptiva, Alex Katz pretende reflejar la apariencia de las cosas tal y como son. En el universo de colores de Todd James los protagonistas son mujeres, piratas, tanques, aviones, personajes extraídos de la masiva información a la que estamos acostumbrados a través de los medios de comunicación. Sus atmósferas son estáticas en contraposición con el ritmo frenético al que estamos acostumbrados en la actualidad. Mark Ryden crea obras de arte que desdibujan las fronteras entre lo sofisticado y lo popular conocido como surrealismo pop. Sus temas se inspiran en muy distintas fuentes y combinan el espectáculo ritualizado con artículos de consumo, creando cuadros vivos cargados de connotaciones culturales tanto históricas como contemporáneas. El lenguaje visual de Phil Frost combina la crudeza callejera a través del uso de materiales encontrados con la elegancia de su estética pictórica en la que destaca la importancia del dibujo, recordándonos su obra a tótems o máscaras tribales. En el trabajo de Allison Schulnik la pintura se convierte en materia y el sujeto se convierte en objeto. Sus pinturas son sobre un estado continuo de flujo: transformación, goteo y fusión, de varias pulgadas de espesor de pintura al óleo sobresaliendo por los lados puede llegar a convertirse en escultura en un mundo lleno de heroínas femeninas.
Galería Jorge Mara (Argentina): Lucía Mara, sus fotografías y fotograbados con el rojo como color predominante con acento pictórico que bien puede jugar junto al collage en la definición de su forma.
Galería Christopher Grimes (Londres): El trabajo de Antonio Ballester Moreno está formado por pinturas, collages y cerámicas con formas geométricas en contacto con la naturaleza a través de sus colores y formas. Se caracteriza por utilizar en su obra colores primarios como el amarillo con el que representa la luz, el azul para el agua y el verde para la naturaleza y formas geométricas como el círculo y el triángulo para representar a la luna o las montañas, con una clara influencia en su trabajo en la cultura africana e islámica.
Galería Guillermo de Osma (Madrid):Pintor figurativo, la obra de Dis Berlín, está plagada de referencias a artistas no necesariamente visuales, en el cine, fundamentalmente el clásico, la publicidad, la literatura y la música; de potente expresividad, valor narrativo y una iconografía renovada.
Marilia Razuk (Sao Paulo): La mayor parte de la obra de Marlon de Azambuja fija atención en la ciudad y la arquitectura, especialmente la arquitectura modernista brasileña.
Federica Schiavo (Roma): Andrea Sala imagina nuevos entornos y mundos al mezclar imágenes presentes y futuras, oscilando entre la realidad, la ficción y la imaginación. Presta especial atención a las formas de diseño y arquitectura, cuestionando los materiales que los constituyen y sus valores formales. Inspirándose en los objetos de diseño, la artista se apropia y transforma las formas ya existentes, encuentra nuevas potencialidades y las configura en nuevos aspectos y contextos.
Galería Baginski (Lisboa): El trabajo de Ana Vidigal recurre a la pintura, collage, ensamblaje e instalación como procesos de descontextualización y reconfiguración de las imágenes de diferentes fuentes, para explorar los valores sociales y políticos los objetos transmiten, a menudo, con respecto a la representación de las mujeres y sus roles sociales. La investigación plástica desarrollada por Cecília Costa se basa en una investigación sobre aspectos matemáticos y de simetría, incidiendo particularmente sobre la división izquierda y derecha del cerebro. Su trabajo comprende dibujo, fotografía, instalación y vídeo y encuentra como denominador conceptual común la implicación del binomio izquierda-derecha en los procesos de construcción del lenguaje, de cómo esa división determina fisonomías humanas específicas o de cómo moldea la percepción espacial.
Galería Helga de Alvear (Madrid): La obra de Marcel Dzama se caracteriza por un lenguaje visual que surge de una amplia gama de referencias y de influencias artísticas, como el Dadaísmo o Marcel Duchamp. El trabajo de James Casebere como parte de la “Pictures Generation” le puso a la vanguardia de los artistas que trabajaban en la fotografía construida. Sus obras de las últimas cuatro décadas desvelan la influencia del cine, la arquitectura y la historia del arte. Sin figuras humanas, las imágenes resultantes invitan al espectador a proyectarse en los espacios que el artista ha creado, apoyándose en su imaginación y memoria para completar los vacíos. La obra de Thomas Ruff se enmarca dentro de una tradición de fotógrafos alemanes herederos directos de la estética conceptual con una estética fría y mirada neutral. Sus rostros, ampliados a una escala aplastante, ponían de manifiesto la absoluta imposibilidad de acercamiento sensible y emocional a la realidad. El trabajo de fotografía de Candida Höfer está marcado por la desnudez, la simplicidad y la objetividad sobre espacios de representación y utilidad pública, vaciados de toda presencia humana. Trabajo que la ha convertido en una de las máximas representantes de la Nueva Escuela de Fotografía Alemana.
Galería Continua (Habana): La escritura a menudo se repite en la obra de Sabrina Mezzaqui, se recupera o se transforma, o sólo se imagina en la cuadratura de una hoja parcialmente grabada.
Galería Max Estrella (Madrid): El trabajo de Eugenio Ampudia indaga, bajo una actitud crítica, sobre los procesos artísticos, el artista como gestor de ideas, el papel político de los creadores, el significado de la obra de arte, las estrategias que permiten ponerla en pie, sus mecanismos de producción, promoción y consumo, la eficacia de los espacios asignados al arte, así como sobre el análisis y experiencia de quien las contempla e interpreta.
Galería Ángeles Baños (Badajoz): En el trabajo de Blanca Gracia se mezcla un imaginario neo-colonial, el exotismo de lo salvaje y oculto, el viaje, nuestra naturaleza domesticada como trasfondo y salvajes reaccionarios y contemporáneos como protagonistas. Fugas del momento actual en que nos encontramos, un culto al escapismo, a la búsqueda de utopías en resquicios del sistema.
El trabajo de Asunción Molinos Gordo se centra en las implicaciones socioculturales de la alimentación y la agricultura; ella emplea fotografía, video, instalación y otros medios para explorar la esfera rural y los problemas del campesinado. Ganadora del premio Solán de Cabras por Ocultamiento, Falsa Escasez o Escasez Fingida, una escultura de madera pintada a mano y de formato mediano que representa un barco granelero. Remite a los que Gran Bretaña y Estados Unidos usaron en la II Guerra Mundial con el patrón de camuflaje dazzle, pero su significado no tiene que ver con los conflictos bélicos sino con la industria alimentaria que se oculta en el mar para así aprovechar la subida del precio.
Leonor Serrano Rivas reflexiona entre cuestiones que van de lo arquitectónico hacia el individuo.
Iris Schomaker trabaja con estilo figurativo, aunque sus personajes son tratados de forma tan esquemática que también podríamos enmarcarla en la abstracción con influencia expresionista. y materiales como el papel, carboncillo, acuarelas o acrílicos para posteriormente cubrirlos de barniz. Sus cuadros de gran formato son colocados directamente sobre la pared, sin marco, de esta manera la obra de arte se fusiona con el entorno.
Con el objetivo de impulsar un nuevo coleccionismo, ARCO puso en marcha en esta edición, la iniciativa de #MeComproUnaObra. A través de este hastag se pretendía animar a nuevos compradores a aproximarse a las galerías y adquirir obras de arte actuales con precios inferiores a los 5.000€.
La edición número 37 de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo ARCO 2018 ha apostado por la reflexión artística y la investigación sobre el concepto de Futuro. Apostando además, por el papel de la mujer en el mundo del arte: todos los programas comisariados han sido liderados por mujeres, que son mayoría entre los galeristas y aumentando respecto a otras ediciones en el grupo de coleccionistas.